Este Fiat vale lo mismo que un Ferrari, ¿cómo es posible?
Vinculada inseparablemente a los coches urbanos a lo largo de su historia, Fiat ha producido durante décadas un gran número de modelos, algunos de los cuales han entrado por derecho propio en el coleccionismo mundial, con precios que rondan las seis cifras.
Coches como el Fiat 8V, un coupé deportivo del que sólo se produjeron 114 unidades entre 1952 y 1954. Uno de estos ejemplares será protagonista de la subasta que Sotheby's celebrará en Monterey durante la Car Week. ¿El precio? Entre 2,7 y 3,2 millones de euros.
Hecho para competir
Es el único Fiat de la historia equipado con un motor V8, en este caso de 2,0 litros y 105 CV, con el que consigue una velocidad máxima de 190 km/h. Este 8V se matriculó por primera vez en febrero de 1954 en Turín y cambió de manos sólo dos años después, acabando en España.
Las modificaciones del Fiat 8V
En ese momento, fue enviado a Zagato para instalarle una carrocería de aluminio ligero típica de la empresa lombarda. Las modificaciones quedan patentes en el frontal especialmente bajo, las tomas de aire sobredimensionadas en el capó y los laterales y un techo de doble burbuja. Unas modificaciones muy especiales sólo reservadas a otros cinco Fiat 8V en el mundo.
De allí se trasladó a Turín, al departamento de competición de Lingotto, donde está el famoso circuito de pruebas de Fiat, en óvalo, para preparar el motor y reducir el peso total mediante la instalación de asientos aligerados, un nuevo salpicadero y otros elementos diseñados para ahorrar kilos.
Una vez realizadas las modificaciones, el 8V regresó a España a manos de su propietario, quien lo llevó por Europa para participar en diversas competiciones como el Rallye Sestrières o el Rallye Automovilista Ibérico, entre otras, en las que cosechó éxitos en su categoría.
En 1962, hubo un nuevo cambio de propietario para el coupé de Fiat y desembarcó en Estados Unidos donde, entre mudanza y mudanza, ha permanecido hasta nuestros días. A diferencia de varios coches de época olvidados en garajes o graneros, el Fiat 8V fue cuidadosamente conservado y restaurado a la perfección en 2009, modificando algunos elementos del motor como pistones forjados y válvulas sobredimensionadas.
Un cuidado metódico que le valió el primer premio de su clase en el Concorso d'Eleganza de Villa d'Este. En 2010 se produjo el regreso a las carreras con la participación (durante tres años consecutivos) en la Mille Miglia. Por último, en 2015, se produjo el traspaso definitivo de propiedad.
