Los coches modernos que se inspiran en el pasado, a veces mirando muy atrás, son cada vez más numerosos, y para algunos de ellos la tradición es tan larga y abundante que uno realmente tiene mucho donde elegir. El Toyota Land Cruiser es un ejemplo perfecto.
El todoterreno japonés es, de hecho, uno de los más vendidos de la marca, miembro de la lista de modelos que han superado los 10 millones de unidades producidas y vendidas, pero también ha sido un icono entre los 4x4 "puros y duros" durante más de 70 años, una categoría ahora reducida a unos pocos modelos estoicos, todos ellos pertenecientes a marcas 'especializadas' como Jeep y Land Rover.
El punto de inflexión de la posguerra
La larga dinastía Land Cruiser comenzó tras la Segunda Guerra Mundial y, al igual que Land Rover, Nissan y compañía, se inspiró en los Willys militares estadounidenses (padre de los posteriores Jeep) que tan buena impresión causaron durante el conflicto.
El primer modelo estaba destinado a uso militar y nació en respuesta a una petición del gobierno de Estados Unidos, en busca de un heredero del mismo Willys, y se desarrolló con unas características de gran robustez y un diseño muy esencial, al "estilo Jeep", precisamente.
Como prueba final, se hizo subir al prototipo la larguísima escalinata del templo de Fudo, lo que demuestra la resistencia y fiabilidad del diseño. El motor era un seis cilindros de 3,4 litros y, ya en 1953, se adoptó el nombre de Land Cruiser, literalmente "crucero terrestre".
Sin embargo, al igual que ocurrió en Europa con Land Rover, posteriormente Defender (nacido directamente como modelo para el gran público), la dirección de la empresa pronto se dio cuenta de que incluso para uso civil había demanda de vehículos sólidos y versátiles, capaces de moverse bien en todo tipo de terrenos. Así que, unos años más tarde, Toyota lanzó un modelo de producción, en diversas variantes, incluidas algunas pick-up.
Las series 20 y 40
La conquista del gran público llegó con la siguiente generación, la Serie 20 (FJ25 y modelos similares), que se desarrolló para la exportación a Estados Unidos, estaba mejor equipada y ofrecía como alternativa un segundo motor de seis cilindros y 3,9 litros. Sin embargo, el verdadero punto de inflexión llegó con la Serie 40, considerada la verdadera segunda generación del Land Cruiser.
Lanzado en 1960 y destinado a permanecer en producción durante casi 25 años, decretó el éxito mundial del modelo y un boom de producción que alcanzó su punto álgido a principios de los 80, cuando se vendieron cerca de 130.000 unidades al año.
La gama se amplió con nuevos motores de cuatro y seis cilindros, incluidos los primeros diésel montados a finales de los 60, y se refinaron el diseño y el equipamiento, al tiempo que la robustez y la capacidad todoterreno hacían del Land Cruiser un auténtico "barco del desierto".
Crecimiento
Con las posteriores Series J50, J60 y J70, el todoterreno japonés evolucionó desde un vehículo versátil pero aún relativamente espartano, hacia un concepto más cercano a un coche todoterreno. La Serie 50, en particular, introdujo la carrocería station wagon, más acogedora, espaciosa y cómoda, mientras que la posterior J80 de 1990 añadió en realidad una segunda línea de modelos, más grandes y lujosos, que más tarde evolucionarían hasta convertirse en las Series 100 y V8, auténticos buques insignia del 4x4.
La serie 'normal' se desarrolló en cambio con el J70 y luego el J90 de finales de los 90, también conocido en algunos mercados como Land Cruiser Prado, que abandonó las variantes pick-up (un papel 'cedido' por derecho al Hilux).
Los modelos 90 y 95, de tres y cinco puertas, con tracción permanente a las cuatro ruedas y un robusto motor turbodiésel de tres litros, ya eran hitos cuando el mercado de los 4x4 explotó a principios de la década de 2000, allanando el camino para la invasión de los SUV.
La nueva generación J120 de 2003 es una evolución de la anterior, pero introdujo notablemente un enorme paquete electrónico que mejoraba tanto la seguridad como la facilidad de conducción todoterreno.
En 2009 dio paso al J150, que abandonó gradualmente (en algunos mercados) el estilo de carrocería de tres puertas y se concentró únicamente en la versión de cinco puertas. Al mismo tiempo, dio sus primeros pasos en la dirección de reducir el consumo de combustible y las emisiones, adoptando un nuevo motor turbodiésel 2.8 más eficiente y con menor gasto de carburante.
Este modelo se mantuvo en el mercado durante varios años, 15 concretamente, hasta el anuncio de su sucesor, la nueva serie J250, que se ha presentado en el verano de 2023 y que luce un diseño inspirado en la generación de los 80 que, sin duda, atraerá a los muchos fans del modelo en todo el mundo.
El aspecto retro no es el único elemento clásico, ya que el último Land Cruiser se mantiene fiel al chasis con largueros y travesaños, y al motor 2.8 turbodiésel, al que no se unirá hasta 2025 un segundo motor diésel, esta vez electrificado. Sin embargo, cuenta con un interior de alta tecnología y mucha electrónica aplicada a la conducción todoterreno, como la evolución del sistema Multi Terrain y la suspensión con barra estabilizadora delantera desconectable.
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