Toyota Celica (1999-2005): ¿un futuro clásico?
El mítico Toyota Celica, uno de los coupés deportivos más famosos y apreciados de la compañía japonesa, nació originalmente en el año 1971, hace ya cinco décadas, pero lo cierto es que la última entrega del modelo también desapareció del mercado hace tiempo.
Lanzado en el año 1999, el Toyota Celica T23 de séptima generación fue el último de la saga Celica, y estuvo a la venta hasta el año 2005. Hoy queremos repasar brevemente la historia del Celica más reciente y probablemente el menos apreciado de todos.
El modelo se lanzó inicialmente con un motor 1.8 VVT-i de 143 CV de potencia y 172 Nm de par motor, aunque un año después se añadió una versión T-Sport más potente, que alcanzaba 192 CV y 180 Nm. Mejoraba en 1,5 segundos el tiempo de aceleración del modelo básico y era también más rápido, alcanzando 225 km/h en lugar de 205.
El Celica T23, de tracción delantera en ambos casos, fue un modelo popular en Europa, con un consumo de entre 8,0 litros y 9,0 litros cada 100 kilómetros en conducción tranquila y que, además, no resultaba pesado, ya que tenía un peso en vacío de entre 1.175 y 1.290 kilogramos, según la versión.
Restyling de 2002
El Celica, que medía 4,35 metros de largo, 1,73 de ancho y 1,31 de alto, fue renovado ligeramente en 2002, estrenando por ejemplo controles electrónicos de tracción y estabilidad, algo que no había estado disponible en el modelo original de 1999.
El equipamiento de serie no era especialmente amplio, pero sí incluía elementos como el aire acondicionado automático, las luces de xenón, elevalunas delanteros eléctricos, ABS, faros antiniebla o radioCD con seis altavoces, por ejemplo.
En la época, el Celica T23 con el motor básico rondaba los 23.000 euros, mientras que la versión T-Sport de 192 CV no llegaba a los 28.000 euros. En la actualidad no tienen fama de ser demasiado fiables, especialmente la versión con el motor de menor potencia, cuyo diseño parece generar problemas con los pistones y los segmentos.
En el año 2005, la historia del Toyota Celica llegó a su fin con el T23, aunque desde 2012 el GT86 tomó el relevo en la gama como un interesante coupé deportivo, que ahora ha dejado paso al nuevo y genial GR 86.
